¡Buen camino, buenagente!

El viernes hemos despedido a nuestra Promoción 2025 y, como cada año, parecía que había sido ayer que los habíamos visto dar sus primeros pasos en nuestras aulas. Celebramos un encuentro fraterno en nuestra Iglesia, donde les acompañaron familias, amigos, profesores y el mismísimo San Antonio. Hubo alegría, nervios y lágrimas, claro, porque todos sabemos que aquí se acaba una etapa.

Pasamos al Salón de Actos del colegio y allí ya pudimos reírnos y compartir esto que somos, una gran familia. Entrevistas divertidas, un vídeo nostálgico, discursos llenos de emoción y, por supuesto, la entrega de orlas.

Este colegio os despide con los mejores deseos. En palabras de David, su tutor:

No olvidéis una de las frases que leímos en la iglesia: Dios es amor y quien permanece el amor, permanece en Dios… Hoy se respira amor en esta sala. Amor del bueno, amor puro. Familias, amigos que encuentran sentido a su vida en todo el cariño que les dais. Con el amor por delante, vuestra vida estará llena de éxitos. Hoy es San Antonio, sabio franciscano, que dijo: “quien ama no conoce nada que sea difícil”.

[...] Nunca olvidéis que la puerta que aquí se abre para dejaros partir hacia vuestro futuro, seguirá abierta para siempre esperando vuestro regreso. Y ese día en el que volvamos a encontrarnos, cuando sea, será un día de alegría, de abrazos y de fiesta. Compartiremos vivencias y os llenaremos la mochila de buenos deseos y de afecto. Aquí estaremos. Es vuestra casa.

Un honor compartir todos estos años con vosotros. Habéis sido trabajadores, divertidos, afectuosos y, cómo no, buenas personas. Os deseamos toda la suerte en vuestra nueva etapa, mucha paz y mucho bien para el mundo, que lo estamos necesitando. ¡Buen camino!